miércoles, 18 de abril de 2012

En llamas, Suzanne Collins

Sinopsis de la editorial (con spoilers):
Contra todo prónostico, Katniss ha ganado Los Juegos del Hambre. Es un milagro que ella y su compañero del Distrito 12, Peeta Mellark, sigan vivos. Katniss debería sentirse aliviada, incluso contenta, ya que, al fin y al cabo, ha regresado con su familia y su amigo de toda la vida, Gale. Sin embargo, nada es como a ella le gustaría. Gale guarda las distancias y Peeta le ha dado la espalda por completo. Además se rumorea que existe una rebelión contra el Capitolio…

Mi opinión (también con spoilers):
Después de la primera parte, realmente de lo que estaba deseosa era de ver otra vez a Katness en al arena (me leí la sinopsis del tercero, por lo que tenía ese dato), así que tener que esperar a dos tercios del libro me hizo impacientarme con tanta hoja de relleno para desarrollar el triángulo amoroso ya apuntado en el libro anterior: Gale-Katness-Peeta. Sin embargo, buena noticia: otra de las cosas que había echado de menos en la primera parte es que no se resaltara esa tiranía del Capitolio, y la actitud de la gente ante una "cosecha" anual que obliga a la gente a observar cómo sus hijos asesinan y son asesinados por otros niños como ellos, amén de las condiciones de extrema pobreza que viven y que claman por una rebelión, sobre todo si nos aseguran que morir de hambre (y no en los Juegos) no era inusual. Así que cuando atisbé por primera vez la trama política en este libro me gustó. Katness ya no va a los Juegos por un cambio de reglas de los mismos, sino porque se ha convertido en un símbolo de rebeldía, han estallado los conflictos en los distritos, y debe pagar por ello. La parte de los Juegos me pareció francamente ingeniosa (tic, tac) y dentro de lo mejor está la evolución de Katness, que entra esta vez con auténtica mente de asesina y el arco a punto. Sorprende cómo, a cada paso, está valorando que los demás son un obstáculo a eliminar para conseguir que Peeta salga sano y salvo de allí. El final está a la altura y vuelve a engancharnos para la nueva entrega. A pesar de todo lo anterior, nadie elegiría este 2º libro como su preferido e insisto: más pulido no le hubiese venido nada mal, y quizá empezar a dejar el limitado punto de vista de Katness para contarnos muchas cosas interesantes que suceden en el exterior.

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